El Concejo Municipal de Riobamba aprobó la remoción de siete concejales, en una decisión respaldada por ocho votos a favor. Con este resultado, el proceso ahora deberá ser evaluado por el Tribunal Contencioso Electoral (TCE), que tendrá la última palabra sobre la legalidad de la medida.
Un proceso polémico con posturas divididas
La sesión, realizada el 25 de enero de 2025, concluyó con la aprobación del informe de la Comisión de Mesa que recomendaba la destitución de los ediles Carlos Aulla, Maritza Díaz, Galo Falconí, Micaela Lema, Nancy Santillán, Celso Rodríguez y Rafael Quitio. Según los concejales alternos, quienes intervinieron en el debate, el procedimiento se llevó a cabo con apego a la normativa vigente.
Magdalena Alvarado, alterna de Carlos Aulla, afirmó que el informe aprobado no presentaba vicios de ilegalidad y sostuvo que se garantizó el debido proceso. Además, cuestionó las acciones de los ediles removidos, mencionando que sus decisiones no habrían sido coherentes con sus declaraciones previas.
Por su parte, Lenin Naranjo, alterno de Galo Falconí, expresó su preocupación por la crisis política en la ciudad y enfatizó que quienes han actuado correctamente no deberían temer al proceso.
Carmen Aucancela, quien reemplazó a Celso Rodríguez en esta sesión, reprochó la falta de participación de algunos concejales alternos en el debate y manifestó su rechazo a cualquier intento de evadir responsabilidades.
Declaraciones del alcalde John Vinueza
El alcalde John Vinueza también se pronunció sobre la decisión del Concejo, utilizando referencias a la filosofía oriental para explicar el desarrollo de los acontecimientos.
"En la filosofía oriental, el dharma es la acción que genera una consecuencia y el karma es el resultado de esa acción", comentó Vinueza, insinuando que la destitución de los concejales sería una respuesta a sus propias decisiones.
Asimismo, aseguró que buscó el diálogo con los ediles cuestionados, pero que las posturas irreconciliables dificultaron un entendimiento. Finalmente, respaldó la resolución con un llamado a la estabilidad institucional:
"Por el bien de Riobamba y la democracia, mi voto es a favor."
¿Hacia una solución o más confrontación?
El concejal Wandy Villamarín lamentó el rumbo que ha tomado la política municipal y expresó su preocupación por la falta de consenso dentro del Concejo.
"No sé en qué momento perdimos el enfoque. Riobamba necesita gestión y soluciones, no enfrentamientos."
Con la decisión ya tomada, el caso pasa a manos del Tribunal Contencioso Electoral, que deberá determinar si la remoción de los ediles se ajusta a derecho. Mientras tanto, la incertidumbre sigue marcando la agenda política en la ciudad.
