La exministra de Energía de Ecuador, Andrea Arrobo, reveló ante la Comisión de Fiscalización que alertó al Gobierno de Daniel Noboa sobre la inminente crisis energética y la necesidad de implementar racionamientos, medidas que, según ella, fueron ignoradas. Además, sostiene que no se le permitió comunicar a la ciudadanía sobre los riesgos, en plena proximidad de la consulta popular del 21 de abril.
En su defensa escrita de 25 páginas, presentada a la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional, Andrea Arrobo explicó que, desde el inicio de su gestión en noviembre de 2023, la crisis energética fue evidente. "Desde marzo registramos fallas técnicas por el alto consumo y baja generación", relató. Para el 1 de abril, advirtió a las autoridades sobre la necesidad de ajustar el consumo y emplear la capacidad térmica recuperada. Pese a estos esfuerzos, según Arrobo, el Gobierno no activó ninguna medida de racionamiento.
Entre los puntos clave, Arrobo detalló que recibió una llamada de Arturo Félix Wong, ministro de Gobierno, quien le indicó que, según inteligencia, las centrales termoeléctricas no estaban operando a máxima capacidad. Frente a esta acusación, la exministra organizó una visita sorpresa a las instalaciones del Cenace, en la que, junto con Wong, constató la crítica situación de los embalses y la infraestructura.
Revelaciones y propuestas:
Andrea Arrobo aseguró que, días antes de la consulta popular del 21 de abril, propuso dar un feriado de dos días como alternativa para reducir la carga de la red eléctrica, medida que también fue desechada. Afirmó que el 15 de abril tenía programada una rueda de prensa y un comunicado para informar a la ciudadanía, pero estas actividades fueron canceladas sin explicación. Al día siguiente, según cuenta, fue llamada a la Presidencia y se enteró por redes sociales de que el presidente le había solicitado la renuncia.
