El Fondo de Salud del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) enfrenta una crisis sin precedentes. Un reciente estudio actuarial revela un déficit financiero proyectado de USD 7.709 millones para el 2030, situación que, de no solucionarse, pondrá en grave riesgo las atenciones médicas de afiliados y jubilados. La falta de aportes del Estado y una gestión administrativa desordenada agravan el problema.
El Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), cuyo Seguro de Salud es clave para la atención médica de miles de afiliados y jubilados en Ecuador, se encuentra en una situación crítica. Un estudio actuarial publicado en junio de 2024, elaborado por la Dirección Actuarial del IESS y auditado por Risko Actuarios, revela que el Fondo de Salud ya está reflejando un déficit financiero desde 2020 y proyecta un agujero económico de USD 7.709 millones para 2030 si no se toman medidas correctivas.
Este estudio, sin embargo, fue publicado con un retraso de cuatro años, ya que la información analizada tiene como fecha de corte el año 2020. Durante ese tiempo, la crisis se ha profundizado, afectando gravemente los servicios médicos que el IESS provee a sus afiliados. La falta de insumos, medicamentos, citas médicas, cirugías represadas y deudas millonarias con prestadores externos son algunas de las consecuencias inmediatas de esta debacle.
Falta de Aporte Estatal y Millonario Déficit
Uno de los factores clave que ha llevado al IESS a esta situación es la falta de contribución del Estado, quien, por ley, debe financiar las atenciones médicas de jubilados y personas con enfermedades catastróficas. Según el informe actuarial, el IESS ha asumido estos gastos con sus propios recursos desde 2020, lo que ha generado un agotamiento progresivo de sus fondos.
A pesar de que la Corte Constitucional en 2020 ordenó la creación de un fondo tripartito para financiar las atenciones de enfermedades catastróficas, financiado por empleadores, afiliados y el Estado, este mecanismo aún no ha sido implementado. El IESS presentó una acción de protección, argumentando que la Constitución establece que es el Estado quien debe cubrir estos gastos, lo que ha retrasado aún más la solución a esta crisis.
El presidente del Consejo Directivo del IESS, Eduardo Peña, anunció que estaba preparando un proyecto de ley para reformar las finanzas del instituto. Sin embargo, en declaraciones del 5 de septiembre de 2024, Peña confirmó que el proyecto quedará pendiente para el próximo gobierno, dejando sin solución inmediata los problemas financieros.
Crisis en la Prestación de Servicios Médicos
La falta de recursos del Fondo de Salud del IESS ha tenido un impacto directo en la calidad de los servicios médicos prestados a sus afiliados. En junio y julio de 2024, la Sociedad de Lucha Contra el Cáncer (Solca), con sedes en Quito y Guayaquil, tomó la decisión de suspender la atención de nuevos pacientes afiliados al IESS debido a una deuda millonaria que no ha sido saldada.
Este tipo de problemas ha sido recurrente, y se ha visto afectada la capacidad del IESS de gestionar las citas médicas, cirugías, y la entrega de medicamentos esenciales. Además, la derivación de pacientes a prestadores externos se ha incrementado, lo que genera costos adicionales que duplican los gastos para el sistema, aumentando la presión financiera sobre el fondo.
Propuestas de Solución: Aumentar la Tasa de Aporte
El estudio actuarial propone varias medidas para enfrentar la crisis financiera del Fondo de Salud. La principal recomendación es incrementar la tasa de aportación, que actualmente es del 5,16%, hasta llegar al 8% de manera gradual en el 2030. Adicionalmente, se propone implementar una tasa de aporte adicional del 1% para la cobertura de salud de los dependientes menores de 18 años, que sería pagada por todos los afiliados, independientemente de si tienen hijos o no.
Además, el estudio sugiere que el Estado debe cumplir con sus obligaciones y realizar los pagos a tiempo para cubrir las atenciones médicas de jubilados y personas con enfermedades catastróficas. También se insta a mejorar el cobro a terceros, como al Ministerio de Salud Pública y al Seguro Social Campesino, por las atenciones que actualmente cubre el IESS sin recibir compensación.
Desorden Administrativo y Gestión Deficiente
Según la abogada Patricia Borja, experta en seguridad social, uno de los problemas más graves que enfrenta el Fondo de Salud no es solo la falta de liquidez, sino un desorden administrativo y una gestión ineficiente. Borja señala que el IESS no tiene un registro claro de cuánto dinero le deben instituciones como el Ministerio de Salud Pública o el Seguro Social Campesino por atenciones realizadas a sus usuarios. Este desorden ha impedido que el fondo cobre millones de dólares por servicios prestados.
A esto se suma la falta de un sistema eficiente para catalogar correctamente las enfermedades catastróficas, lo que ha dificultado la consolidación de los pagos correspondientes por parte del Estado. Las unidades médicas del IESS tampoco están operando al 100% de su capacidad, lo que obliga al instituto a derivar a pacientes a prestadores externos, duplicando los costos de atención.
Otras Causas de la Crisis
El estudio actuarial también resalta otras causas estructurales de la crisis, como la redistribución de aportes decidida en 2015 durante el gobierno de Rafael Correa. En ese momento, el Consejo Directivo del IESS incrementó temporalmente la tasa de aportación al Fondo de Salud del 5,71% al 9,94%, reduciendo el aporte al Fondo de Pensiones. Sin embargo, la tasa de aportación al Fondo de Salud nunca se recuperó a los niveles previos, quedando en el 5,16%, lo que ha reducido drásticamente los ingresos.
El IESS también enfrenta una deuda acumulada del Estado por más de USD 5.000 millones por atenciones médicas a jubilados, y apenas ha recibido pagos parciales en los últimos años. En 2023, el gobierno de Guillermo Lasso pagó USD 232,9 millones, y para 2024, el Ministerio de Finanzas ha presupuestado USD 169 millones, muy por debajo de los USD 782 millones que el IESS solicitó.
La situación financiera del Fondo de Salud del IESS es crítica y requiere medidas urgentes. Si bien el estudio actuarial propone soluciones como el incremento de la tasa de aportación y el cobro de deudas, la falta de gestión eficiente y los problemas administrativos siguen siendo obstáculos importantes. Mientras tanto, los afiliados y jubilados continúan sufriendo las consecuencias de un sistema de salud que parece estar al borde del colapso.