Las bancadas de la Revolución Ciudadana y Acción Democrática Nacional (ADN) protagonizaron un nuevo choque en la Asamblea Nacional el 4 de junio, esta vez en torno a la situación de la vicepresidenta Verónica Abad. El correísmo busca incluir en el orden del día de la sesión del pleno del 6 de junio un exhorto al presidente Daniel Noboa para que cumpla con lo establecido en la Constitución, la cual indica que, en ausencia temporal del presidente, quien debe sucederlo es el vicepresidente.
Además, la Revolución Ciudadana advierte al procurador General del Estado, Juan Carlos Larrea, que no emita criterios jurídicos y constitucionales que serían de exclusiva competencia de la Corte Constitucional. Esta postura surge tras la consulta elevada por el presidente Noboa a la Procuraduría, para determinar si debe solicitar licencia en caso de postularse para las elecciones presidenciales de 2025.
La iniciativa de incluir este exhorto para debate en el pleno fue propuesta por Paola Cabezas, del Grupo Temático Parlamentario por los Derechos de la Mujer, integrado mayoritariamente por asambleístas de la Revolución Ciudadana. Cabezas asegura que, más allá de las discrepancias políticas con Abad, es necesario cumplir con la ley y la Asamblea Nacional tiene responsabilidad en ello.
Por su parte, el oficialismo sospecha de un posible acercamiento entre el correísmo y Abad, basándose en las recientes declaraciones de la vicepresidenta, que no han sido "contundentes contra la corrupción", según Valentina Centeno de ADN. Incluso, Centeno insinuó que podrían estar en juego indultos a favor de personajes políticos con sentencias ejecutoriadas si Abad asume la presidencia en reemplazo de Noboa.
La disputa entre ambas bancadas evidencia las tensiones políticas en torno a la posibilidad de que la vicepresidenta Verónica Abad asuma el poder en caso de ausencia temporal del presidente Daniel Noboa, y las implicaciones que esto podría tener en el panorama político del país.
