Este 14 de febrero de 2025 se cumplen dos semanas desde el secuestro de Ronny Camba Torres, director administrativo del hospital Teodoro Maldonado Carbo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en Guayaquil. El caso ha generado alarma nacional y evidencia la grave crisis de seguridad que afecta a una de las principales instituciones de salud del paÃs.
El 31 de enero, Ronny Camba fue interceptado por hombres armados mientras conducÃa su vehÃculo por el sector de La Atarazana, en el norte de Guayaquil. Según reportes policiales, los atacantes lo obligaron a subir a otro vehÃculo y lo llevaron con rumbo desconocido. Desde entonces, no se sabe nada de su paradero.
Al dÃa siguiente, sus familiares denunciaron su desaparición y revelaron que personas desconocidas contactaron a sus allegados exigiendo un rescate de USD 100.000**para garantizar su liberación. Sin embargo, hasta el momento no hay avances significativos en las investigaciones ni señales de vida del funcionario.
El secuestro de Camba ha generado indignación y preocupación en la comunidad médica y en la población ecuatoriana, especialmente porque ocurre en medio de una profunda crisis en el hospital Teodoro Maldonado Carbo, una de las instituciones más importantes del IESS.
Tras el secuestro, el gerente del hospital, Franklin Encalada, exministro de Salud, renunció a su cargo, dejando al cirujano plástico Nelson Estrella como reemplazo temporal. Sin embargo, Estrella también dejó el puesto rápidamente, y el doctor Alberto Sper asumió la gerencia interina, convirtiéndose en el sexto médico en liderar el hospital en el último año.
El presidente del Consejo Directivo del IESS, Eduardo Peña, reconoció en una entrevista radial que los gerentes del hospital enfrentan constantes amenazas y actos de intimidación por parte de "mafias polÃticas" y organizaciones delictivas.
"El nombre del juego se llama pelear con las mafias, lo estamos haciendo y vamos a ganar en el largo plazo", declaró Peña el pasado 12 de febrero.
Sin embargo, tanto Peña como el ministro de Gobierno, José De la Gasca, han evitado referirse directamente al secuestro de Camba. En una entrevista reciente, De la Gasca señaló que el hospital ha sido históricamente un blanco de intereses criminales debido a su presupuesto y recursos.
En respuesta al secuestro, el Gobierno asignó 10 militares y 10 policÃas de élite para custodiar las áreas más sensibles del hospital. Estas medidas buscan proteger al personal y evitar nuevos incidentes relacionados con la inseguridad.
El caso de Ronny Camba no es un hecho aislado. Hace dos años, la anterior directora administrativa del hospital, Nathaly López, fue asesinada a tiros por sicarios en el sur de Guayaquil. Este patrón de violencia ha generado temor entre los trabajadores del hospital y pone en evidencia la influencia de grupos delictivos en la región.