La jueza Nubia Vera, de la Unidad Judicial de la Familia de Quito, podría ser destituida luego de que la delegación provincial del Consejo de la Judicatura en Pichincha solicitara investigarla por supuesto error inexcusable en una causa relacionada con una empresa de tecnología informática y comunicaciones.
El pasado 23 de diciembre de 2024, tres jueces de la Sala Penal de la Corte de Justicia de Pichincha tomaron conocimiento del caso y otorgaron un plazo de cinco días para que Vera presente un informe detallado con los respaldos correspondientes en relación a la denuncia.
La acusación contra la jueza se basa en presuntos actos de "dolo, manifiesta negligencia o error inexcusable", lo que podría derivar en la pérdida de su cargo.
El mismo día de la notificación, Vera denunció en la Asamblea Nacional presuntas presiones del presidente del Consejo de la Judicatura, Mario Godoy, y otros funcionarios para modificar una sentencia que reinstalaba las funciones de la vicepresidenta Verónica Abad. Según Vera, se le entregó un pendrive con "insumos" para modificar su resolución, y recibió amenazas que incluían acabar con su carrera profesional.
Además, en su comparecencia ante la Comisión de Justicia, Vera mencionó una supuesta conversación en la que Godoy le mostró un chat en el que el presidente Daniel Noboa supuestamente exigía resultados. Sin embargo, aclaró que no puede confirmar la autenticidad del número del mandatario.
Godoy negó las acusaciones en una entrevista con FM Mundo, calificándolas de infundadas, y presentó una querella por calumnias contra Vera, que será tramitada en la Unidad Judicial Penal de Iñaquito. Por su parte, Vera sigue firme en sus denuncias y solicita garantías para su seguridad e independencia judicial.
El caso ha generado gran controversia en el ámbito político y judicial ecuatoriano, con implicaciones que podrían afectar tanto al Consejo de la Judicatura como al sistema judicial del país.
