La madre de María Belén Bernal, Elizabeth Otavalo, denuncia corrupción y pago de favores en la justicia ecuatoriana, en medio de la conmovedora historia de su hija, quien fue asesinada en la Escuela Superior de Policía de Quito. Este caso ha desatado una ola de indignación y protestas en el país.
Cuerpo de la Noticia: El 12 de septiembre de 2022, la abogada quiteña de 34 años, María Belén Bernal, ingresó a la Escuela Superior de Policía General Alberto Enríquez Gallo para visitar a su esposo, el exteniente Germán Cáceres, y nunca más salió. Su madre, Elizabeth, describe a María Belén como una mujer generosa y alegre, que siempre estaba dispuesta a ayudar a los demás.
Las investigaciones iniciales revelaron que María Belén fue vista por última vez en Miravalle, Quito, y que su entrada a la institución policial estaba registrada, pero no así su salida. La noche anterior a su desaparición, fue asesinada por Cáceres, quien posteriormente huyó del país tras presentar una denuncia por su desaparición.
El 14 de septiembre, la indignación de la sociedad creció al conocerse que Cáceres había escapado, a pesar de que ya existía una orden de detención en su contra. La Fiscalía detuvo a la cadete Joselyn Sánchez, acusándola de desaparición involuntaria, mientras que el cuerpo de María Belén fue encontrado el 21 de septiembre en el Cerro Casitagua, con la autopsia confirmando que murió por estrangulamiento y asfixia.
La lucha por justicia se intensificó, con protestas y plantones en las calles, apoyando a Elizabeth Otavalo. Finalmente, Germán Cáceres fue capturado el 30 de diciembre de 2022 en Colombia, y el 26 de mayo de 2023 fue sentenciado a 34 años y ocho meses de prisión. Sin embargo, la madre de María Belén continúa denunciando la corrupción en el sistema judicial, ya que los otros dos involucrados en el caso fueron declarados inocentes.