Durante la audiencia de juicio en contra de cinco personas por el asesinato de Fernando Villavicencio registrado el 9 de agosto de 2023, la Fiscalía dio paso a las víctimas colaterales. Todas recibieron impactos de bala.
Patricia Barragán, quien participó de un almuerzo con Villavicencio cerca del coliseo del Colegio Anderson, indicó que cuando salió de la institución educativa quiso hablar con el entonces candidato, pero no pudo. Durante el tiroteo, Barragán recibió disparos en el pecho y en la mano.
Gissela M. mencionó que el personal de seguridad la alejó de un empujón cuando salían del coliseo. Fue allí que se fijó que una persona estaba cerca de Villavicencio con una bandera y que fue el mismo sujeto que se dirigió al vehículo, sacó un arma del pecho y enseguida se escucharon los disparos. Recordó que Villavicencio se agachó y entró al vehículo, pero Gissela esperaba que sea un carro blindado. Fue en ese momento que sintió un impacto de bala y perdió el conocimiento.
Al recobrar el conocimiento, indicó que vio a la gente que pegaba a una persona en el piso. Él habría sido el atacante. Gissela M. fue trasladada a la Clínica de la Mujer y vio a Villavicencio en una camilla. Mientras, llegaban los heridos miró que alguien tomó una foto del cadáver.
Contó que los médicos le pidieron a ella que se vaya porque tenían el temor que vayan a rematar a todos, por lo que fue operada en un hospital público.
En tanto, José P. dijo que ese día vio a su amigo, Fernando Villavicencio, un poco «apagado» y lo acompañó hasta la puerta grande de la salida, se despidieron y enseguida empezó el tiroteo. Dijo que sintió dolor en la pierna y se dio cuenta que fue impactado por una bala.
Otras víctimas
Gloria L., otra víctima colateral también estuvo en el lugar del crimen. Ella es promotora de eventos y ese día estaba en la sede de campaña de Villavicencio, cuando los sobrinos del entonces candidato presidencial le pidieron que les acompañe al mitin.
Relató que salió antes del coliseo y vio a una camioneta afuera, pero no pensó que ese vehículo se iba a usar porque siempre estaba en un carro blindado. Tras la confusión, una persona le informó que recibió impactos de bala en el brazo y el pecho y fue llevada a una casa de salud, en donde la operaron.
Ruth C., es otra víctima colateral. Ella es jubilada y asistió al evento porque se enteró por las redes sociales. Cuando terminó el evento lo siguió, pero escucho disparos. Ella recibió un disparo en la espalda y se arrastró para resguardarse.
A su vez, Daniel F. recibió cuatro impactos de bala porque ese día pasaba por el lugar de los hechos en el momento del ataque.