La Policía Nacional fue alertada por el Ecu 911 y el chat comunitario, movilizándose al lugar para encontrar los camiones desaparecidos. La vivienda donde se cometió el robo es propiedad de un distribuidor de gas, quien reportó el robo tras ser informado por los moradores.
Un familiar que reside en la casa donde se guardaban los camiones, informó a la policía que se encontraba descansando cuando escuchó ladridos de perros. Al asomarse al patio, vio a ocho personas desconocidas con mascarillas. Uno de ellos lo apuntó con un arma de fuego y lo obligó a entrar en la casa, donde lo ataron junto a su esposa de 76 años. Los ladrones rebuscaron en los cajones, llevándose USD 4 000 y tres teléfonos celulares.
Después de amordazarlos, los delincuentes robaron los tres camiones de gas, uno de los cuales estaba asegurado. Las llaves de los camiones se encontraban en los switches. Las cámaras de seguridad registraron el robo y los camiones fueron encontrados abandonados en Llano Chico. La policía está investigando el caso y ha solicitado la colaboración de la Policía Judicial para esclarecer los hechos.